Esta receta ha sido adaptada de una receta de Yotam Ottolenghi. Ingredientes: 5 dientes de ajo, pelados 3 cáscaras de limón 2 hojas de laurel 1 cucharadita de hojuelas de pimienta roja 125 ml de aceite de oliva 1/2 cucharadita de sal marina 1/2 cucharadita de paprika 240 g de queso feta, en cubos Preparación: 1. Calienta una sartén pequeña sobre fuego medio alto. Cuando esté bien caliente, agrega los dientes de ajo y cocina durante 3-4 min, volteando de vez en cuando, hasta que los dientes de ajo se vean carbonizados/"quemaditos". 2. Agrega las cáscaras de limón y las hojas de laurel a la sartén y cocina por 90 segundos o hasta se vean un poco "quemaditas". 3. Agrega las escamas de chili y cocina 30 segundos o hasta que estén bien tostadas. 4. Retira la sartén del calor y agrega el aceite, la sal y la paprika. Mezcla bien todo y deja enfriar. 5. Añade el queso feta a la mezcla de aceite y revuelve cuidadosamente para que cada cubo se unte del aceite. Deja el queso marinando a temperara ambiente si te lo vas a comer en un par de horas. De lo contrario refrigera en un contenedor sellado. Si lo vas a usar luego, saca el queso feta del refrigerador aproximadamente una hora antes de que quieras servirlo para permitir que el aceite vuelva a la temperatura ambiente y se ablande (se va a poner sólido en el refrigerador). También puedes conservarlo en el refrigerador y cada vez que necesites usarlo sacas tu porción con una cuchara, la colocas en un bowl pequeño y la llevas al microondas 5-10 segundos, o hasta que el aceite se derrita. NOTA: El queso feta marinado debe durar en el refrigerador durante 5 días, si se almacena correctamente en un frasco con tapa hermética con la parte superior del queso siempre cubierta con aceite de oliva. Puedes servirlo como aperitivo con galletitas/tostadas, sobre tus ensaladas o como se te ocurra a ti!